sábado, 11 de junio de 2016

Azud de El Mesto y cañón del rio Guadalix (16,20 Kms.)

En esta ocasión nos proponemos recorrer el cañón del río Guadalix, nos encaminamos a la localidad del Molar, de aquí bajaremos hasta el Azud del Mesto, presa inaugurada en 1905 para la toma de agua y hoy en desuso, recorreremos el cañón del río Guadalix casi hasta el polígono industrial El Raso en San Agustín y volveremos a la localidad de El Molar.


Datos de la ruta.


Llegamos a El Molar sobre las 8:00 de la mañana y nos dirigimos a la parte alta del pueblo para aparcar junto al cementerio, de aquí parte una pista que baja hacia el Azud de El Mesto. Tomamos la pista y comenzamos a descender, al fondo el Cerro de San Pedro.





Desde nuestro camino podemos ver la torre árabe reconstruida de El Molar, al lado de la misma para una carretera que une  El Molar con San Agustín, por la misma haremos la vuelta y haremos un descanso junto a la torre.


El camino esta señalizado con los colores blanco y celeste.


A medida que vamos bajando la vegetación va pasando de matorral a bosque de encina.


Entre la vegetación vemos una construcción.


Pasamos junto a ella, debe utilizarse para labores de mantenimiento del Canal.


Una mariposa junto al camino, hay que elegir el momento justo para disparar la cámara, unos centímetros de más pueden malograr la foto.


Llegamos al río Guadalix y tomamos un camino a la derecha para llegar al Azud de El Mesto, actualmente en desuso, hay una construcción más abajo donde se toma el agua y va por una tubería subterránea.


Volvemos sobre nuestros pasos hasta la zona donde se toma el agua y comenzamos a andar cañón abajo, vamos caminando sobre la conducción actual, el río Guadalix queda a nuestra derecha.


Una bonita nota de color en el recorrido.


Mirando hacia atrás vemos la casilla al lado de la que pasamos.


A lo largo del camino hay varias construcciones, no se si su función es hacer de respiradero a la conducción o la de permitir el acceso a la misma, o posiblemente ambas.


La vegetación de la zona es de ribera junto al río para dar paso a un bosque de encinas bastante espeso.

También encontramos alguna seta.


Desde que circulamos por el cañón nos vamos librando de los rigores del sol.


Volviendo la vista atrás vemos el viaducto del Zegrí.


Pero no nos equivoquemos, no está tan cerca.


Vemos como el camino va bordeando la montaña.


Hasta ahora hemos oído el río pero la vegetación junto al mismo no nos permitía ver tramos del mismo.

A partir de aquí la vegetación comienza a clarear y nos permite ver tramos del mismo.



Estamos llegando a la Peña del Águila, utilizada para hacer escalada.


En la base de la Peña quedan los restos del antiguo canal excavado en la piedra y hoy en desuso.


Un rosal silvestre.


A lo largo de esta conducción excavada en la piedra hay algunos accesos desde el camino.


Formación rocosa junto al río.


Pasada la Peña del Águila no queda mucho para llegar al sifón del Atazar que sirve para llevar el agua por su propio peso al otro lado del cañón.


Pasado este encontramos una pista que baja nuestra derecha y que pierde altura con rapidez bajando hacia el río, al llegar abajo tomamos a nuestra derecha hacia las Cascadas del Hervidero, no hay perdida, aparte de la señalización el camino acaba en las mismas.


Y foto de familia.


Las cascadas sin bichos.


Estando en las mismas se acerca otro caminante con su perro y este aprovecha para nadar un poco.


Emprendemos el viaje de vuelta para lo cual tenemos que subir un primer tramo de escalera.


Y un segundo tramo.


Iniciamos el descenso del cauce del río y tenemos que cruzar el mismo por un puente, desde el otro lado tendremos acceso a otros bonitos parajes.


Como este otro salto de agua.


Volvemos sobre nuestros pasos para iniciar el ascenso al sifón de El Atazar. Desde aquí lo vemos en la parte alta de la ladera.


Antes de abandonar el cauce del río vemos otro puente en desuso.


Una vez en el sifón tomamos la pista a la derecha, está asfaltada, aunque no en muy buen estado,  y proviene de la carretera que une El Molar con San Agustín, también da servicio a una urbanización.


Ganando altura tenemos esta vista de San Agustín.


La cuesta se hace un poco pesada, sobre todo porque comienza a apretar el calor y no tiene muchas zonas de sombra. Vemos las curvas de la pista por la que hemos subido.


Una vez que llegamos a la carretera que nos llevará hasta El Molar tomamos a la izquierda, seguimos ganando altura.


La carretera no está muy transitada, lo cual es de agradecer pero a estas horas el asfalto parece desprender fuego, ya tenemos ganas de llegar. Tenemos la torre a la vista, una vez lleguemos a ella el camino sera descendente.


Torre árabe de El Molar reconstruida.


Aunque estamos cerca de nuestro destino aprovechamos para descansar un poco, no estamos mucho porque el calor aprieta ya bastante, desde aquí tenemos estas vistas de Madrid.


Iniciamos el descenso y ya tenemos nuestro punto de inicio a la vista.


Un descansito antes de emprender la vuelta.


Si quieres descargar la ruta en formato GPX puedes hacerlo accediendo a Wikiloc