Para hoy tenía planificada otra ruta pero Maki me ha comentado que se ha apuntado a una iniciativa de la Sociedad Española de Reumatología para una caminata virtual de 10 kms.. El coste de la inscripción es de 3€ y te envían un dorsal y un código para la inscripción en una app que será la que vaya midiendo la distancia. No hay un recorrido específico donde se reúna la gente y se ciñan todos al mismo, sino que la aplicación registra la distancia y cada uno hace su recorrido donde más le apetece. No sabía como funcionaba esta app si había que marcarle el inicio y fin de la ruta o ella iba marcando la distancia. Al final se pulsa al iniciar la actividad y ella desconecta cuando lleva 10 kms.. También tienen la posibilidad de facilitar fotos a la organización que las cuelga en redes sociales. Todos los años por estas fechas organizan esta carrera virtual por si alguien quiere apuntarse para futuras ocasiones. Con la ruta elegida casi tenemos problemas porque al comienzo no había cobertura en el móvil y hasta que la tiene no comienza a grabar, al final, nos marca el final de la ruta poco antes de terminar nosotros la nuestra.
Dejamos la ruta prevista bordeando el embalse de Pinilla de 16 kms. por esta por el Valle de la Angostura, subiendo por la presa del Pradillo y sobrepasando el puente medieval de la Angostura para bajar por la orilla opuesta del río Lozoya, toda una clásica en la sierra que todavía no había hecho, muy sencilla y fácil de hacer por los pocos desniveles y la longitud de la ruta.
Comenzamos con la vista 3D de la misma.
Plano con puntos kilométricos y sentido de la marcha y un perfil con los repechos, marcando en rojo aquellos mas pronunciados, pero no nos dejemos engañar porque es muy cómoda de realizar.
El indice IBP de la ruta con su tabla de interpretación.
Perfil con repechos de más del 15% y su tabla de datos.
Y una tabla de desniveles.
El punto de inicio de la ruta es una zona de aparcamiento en la bajada del puerto de Cotos hacia Rascafría donde hay varios restaurantes, poco antes de llegar hasta la pista que lleva al aparcamiento del mirador de los Robledos pero a nuestra derecha, hay una primera entrada que esta cerrada con una puerta y tendríamos que entrar por la segunda entrada un poco más adelante, cuando llegamos sobre las 8:00 de la mañana hay algún coche pero se puede aparcar con comodidad, cuando finalizamos la ruta y nos vamos el aparcamiento esta a rebosar, una opción sería llegar al aparcamiento del mirador de los Robledos y venir andando hasta esta zona, aumentaría un poco la distancia de la ruta pero la última que aparqué allí, a la hora de irme había bastante espacio libre. En esta ocasión Púa hará a pie solamente el camino de vuelta desde que cruzamos el río Lozoya hasta el final de la ruta.
Nos disponemos a comenzar la ruta y que mejor manera de hacerlo que soltando lastre 😂😂😂.
Bordeamos el primer restaurante por su derecha y tomamos una pista que nos llevará a los siguientes, estos postes con la parte superior pintada de rojo indican que llevamos el camino correcto.
Encontramos otros postes y un cartel informativo, no es exactamente de la ruta que vamos a hacer pero parte de nuestro recorrido lo hacemos por la ruta que marca el cartel. Púa ya sabe cual es nuestro camino y nos dirige.
Este es el último poste que encontramos y donde, realmente, comenzamos la ruta.
Comenzamos con el río Lozoya a nuestra izquierda ofreciéndonos bonitas vistas del mismo.
Pasamos enfrente de un restaurante que está en la otra orilla y por donde cruzaremos a nuestra vuelta, no por estas piedras sino por un puente que da acceso al mismo.
Comenzamos por una senda muy cómoda, sin apenas desnivel, tenemos que tener en cuenta que vamos junto al cauce del rio, si el desnivel fuera mayor el caudal bajaría con más fuerza.
No tardando mucho llegamos a la presa del Pradillo, comenzamos a verla entre los árboles de las orillas.
Subimos unas piedras, con facilidad, y llegamos a la parte alta del muro.
La presa no tiene mucha profundidad.
Y otra foto por la parte de arriba.
Proseguimos la ruta, podemos ver el color ocre de los helechos, indicativo de que las temperaturas ya no son suaves y que las plantas comienzan a prepararse para el invierno, Maki también va todavía con ropa de abrigo
Llegamos a una caseta para toma de muestras de agua, en su pared hay un indicador para ver la altura que toma el agua.
Vamos caminando junto al arroyo, la pendiente es muy suave.
Los musgos que tapizan las piedras comienzan a tener un verde más intenso.
Y el río nos regala algunas bonitas vistas que podemos disfrutar desde el camino.
Aquí tenemos que tomar un poco de altura respecto al cauce bordeando las piedras de la ladera.
Y llegamos a la pista, tendremos que tomar a nuestra izquierda.
Desde la pista todavía tenemos bonitas vistas del río, vemos alguna charca.
Y vemos también algunas setas, no comestibles, pero estas son precursoras de las otras. Al otro lado del río vemos alguna persona con cestas y a lo largo de la ruta encontraremos más gente a la búsqueda.
Llegamos al puente medieval de la Angostura y en su base una pequeña poza.
El personal femenino posando junto al puente.
Cruzamos el puente y seguimos el curso del río por la otra orilla, encontraremos una pequeña poza.
La parte alta de la poza.
Ganamos un poco de altura, de aquí hasta que comencemos la vuelta será el tramo con mayor desnivel pero será bastante cómodo de subir.
Vemos algunos acebos con su frutos rojos.
Aquí vemos como la pendiente comienza a aumentar levemente.
Un arroyo por nuestra izquierda es el de la Majada del Espino y otra seta en el mismo cauce.
Desde que hemos cruzado el arroyo vamos por la R.V. 1.
Y otro arroyo más adelante, por esta orilla encontramos más corrientes de agua que por la otra.
Y más setas junto al camino.
Ganamos altura casi sin darnos cuenta, el arroyo se be en el fondo del barranco.
Llega un momento que parece que la pendiente se hace más empinada, pero en el último momento, casi no se ve hasta que no estamos encima, vemos una pista a nuestra derecha que será la que tengamos que tomar. La pista que llevábamos gana altura con rapidez.
Zona más húmeda al lado del arroyo.
Pasamos sobre una pasarela de madera.
Y deberíamos pasar por esta otra.
Pero no hay cauce de agua y está bastante deteriorada, podemos pasar por la zona sin necesidad de usarla.
Llegamos al puente de madera que cruza el río Lozoya, a partir de aquí iniciamos la vuelta por la otra orilla. También será el comienzo de ruta para Púa.
Una vista sobre el puente de madera.
Y un enorme roble junto al río.
Cruzado el río vamos a dar al Camino de las Vueltas, un poste indicador de la ruta R.V. 1 junto al camino y Púa oliendo el mismo, algún perrete ha debido marcar en el mismo.
Nosotros tomaremos a la derecha de la pista.
Bajamos por la pista y encontramos una poza donde Maki aprovecha para hacerle una foto con el dorsal de la ruta para facilitar a la organización de la carrera virtual.
Seguimos perdiendo altitud con la pista, se ve claramente la bajada.
Hacemos un alto en el camino para tomar unos pistachos y reponer fuerzas pero estos no solo nos gustan a nosotros.
Y seguimos la pista con bastante comodidad.
A nuestra izquierda vemos unos hitos de piedra, aunque al principio no se distingue muy bien, aquí empalmaremos con otra pista que baja de la M-604, se ve verdear por lo que no debe estar muy transitada, nosotros vemos bajar dos personas por la misma que, no tardando mucho, nos pasarán.
Un arroyo a nuestra izquierda.
A nuestra derecha vemos el puente de la angostura, solo tenemos que salirnos de la pista para llegar al mismo, el track que llevo en el GPS también lo hace.
La pista sigue adelante, hace una curva y baja hasta el puente, las personas que nos pasaron hace un rato bajan por la pista, de haberlo sabido hubiera hecho lo mismo, no me gusta salirme de las pistas y contribuir a la degradación del entorno.
Aprovechando para otra foto para la carrera.
Y esta con bichillo incluido.
El puente de la angostura por su parte inferior.
Cruzamos otra vez por el puente otra vez y continuamos por el otro lado, en realidad el recorrido de la ruta que hacemos tiene forma de 8, nada más cruzar tenemos una bifurcación, en la pista inferior vemos el poste indicador y en la superior y pintada sobre un pino una X indicando que no debemos tomarla. Aunque vemos que hay gente que sube por la de la derecha nosotros tomaremos por la izquierda. Púa tiene un sexto sentido y ya sabe por donde debemos de ir.
Caminamos rodeados de pinos, por aquí muy espesos y casi no dejan pasar el sol, la senda se estrecha un poco pero no deja de ser muy cómoda para caminar.
Y proseguimos nuestro camino, ya intuimos que no debe de quedar mucho, no vamos cansados pero por el tiempo transcurrido intuimos el final no muy lejano, el móvil de Maki va "cantando" las distancias conseguidas, van por debajo de las recorridas por lo que vamos con temor de llegar al final y no indique los 10 kms. necesarios.
Llegamos al arroyo de Valhondillo y Púa se queda pensativa, es enemiga acérrima de los puentes, aunque en estos no ha tenido problema para pasar, su problema debe ser la altura.
Vista del arroyo desde la pasarela, de todos los que confluyen al Lozoya es que hemos encontrado con más caudal.
Y otro arroyo más.
Con su cauce. Todos que no pongo nombre es que aparecen en mapas como corrientes intermitentes de agua
Y una bonita vista de un acebo.
En estas fechas comienzan a ponerse preciosos, cuando hay varios juntos le dan el toque de color al bosque.
Y proseguimos camino, por aquí hay mas humedad y la protección de los pinos hacen que los helechos por aquí sigan con tonos verdes.
Se nos paso hacer la foto de los componentes de la ruta y aprovechamos por aquí para hacer una.
Y otro arroyo más.
Y su cauce.
Abajo el río Lozoya.
Y otro más, en esta zona abundan.
Y su cauce.
El río comienza a remansarse, es posible que estemos a tiro de piedra de la presa del Pradillo.
Efectivamente, entre los pinos ya la vemos.
Aprovechamos para hacer otra foto, esta vez sin Púa.
Al fondo vemos unos patos y alguien pescando en la presa.
Los ánades reales nadando en la presa.
Llegando al muro , ganamos un poco de altura respecto a la presa, en esta orilla también tenemos algún pescador. Bonita vista de la presa, pinos al otro lado, robles a este y la Sierra de Guadarrama al fondo.
Al fondo un portillo de madera que cruzaremos. Por aquí ya se ve más gente en la ruta.
Aquí lo tenemos.
Tras pasarlo tenemos una acequia a nuestra izquierda con alambrada a cada lado de la acequia, tenemos que seguirla hasta que se acaba la alambrada, deberemos ir a nuestra izquierda hasta llegar a la valla del restaurante, hay un pequeño paso marcado con una X indicando que no debemos pasar por allí para seguir el PR, pero nosotros SI debemos abandonar aquí la senda y pasar el portillo, llegando al río.
Tomaremos a nuestra izquierda para subir al puente que da acceso al restaurante desde la otra orilla por el que cruzaremos el Lozoya, y tras pasarlo llegaremos a los últimos postes que encontramos a la hora de iniciar la ruta, deshacemos el camino hasta llegar al aparcamiento, a esta hora repleto de coches, después de soltar bártulos, apagar cámara y GPS nos disponemos a iniciar la vuelta.
Bonita ruta y muy cómoda de hacer, para nosotros según el GPS 13,3 kms. y para Púa unos 6.5 kms.
Si quieres descargar el track de la ruta puedes hacerlo desde WIKILOC
